Fluidímetro Daniel

El fluidímetro DANIEL es un instrumento sencillo y confiable diseñado para medir la fluidez de materiales espesos, como tintas, pinturas, pastas o masillas. Este equipo permite evaluar visualmente cómo se comporta un producto cuando se expande sobre una superficie, proporcionando una referencia útil sobre su capacidad de flujo.

¿Para qué se utiliza?

El fluidímetro se emplea principalmente en aplicaciones industriales y de laboratorio donde es importante controlar la consistencia y comportamiento reológico de:

• Tintas de impresión.
• Pinturas de alta viscosidad.
• Masillas o pastas.
• Productos semisólidos.

Su uso frecuente está asociado con el control de calidad en procesos donde la fluidez afecta el rendimiento del producto final.

¿Cómo funciona?

El procedimiento de uso es muy simple:

1. Se vierte el producto a analizar en un depósito semicilíndrico dispuesto en posición horizontal.
2. Al levantar el instrumento de forma vertical, el material fluye por una placa graduada fijada en perpendicular al depósito.
3. La distancia recorrida por el material en un tiempo determinado se convierte en el valor de fluidez.

Este método directo permite observar tanto la capacidad de flujo como la calidad de ligazón del producto, reflejando propiedades que pueden variar entre materiales con viscosidades similares pero diferente comportamiento reológico.

Ventajas del fluidímetro DANIEL

• Fácil de usar: no requiere calibraciones complejas ni energía eléctrica.
• Evaluación visual inmediata del comportamiento del material.
• Ideal para productos con alta viscosidad o en forma de pasta.
• Herramienta práctica para el control de calidad en sectores gráficos, pinturas y recubrimientos.

Aplicaciones comunes

• Control de fluidez en procesos de impresión.
• Evaluación de consistencia en laboratorios de formulación.
• Comparación entre lotes de producción.
• Pruebas de calidad en pinturas y recubrimientos industriales.